martes, 29 de septiembre de 2009

Avance informativo

Como ya comenté por aquí, el lunes me dieron un sí condicional. Mi ponente es mi jefe desde hace 5 años, así que nos vamos conociendo un poco. Me pinchó un poco por aquí, me tocó el ego por allí, y consiguió que fuera yo y no él la que quisiera mejorar toooooodos los puntos flojos que él había visto, y que yo creí imposible no haber visto antes en cuanto me los hubo enumerado.

Entré en modo de estrés máximo, ya que la fecha límite de entrega de la memória era el día 30. Digo era porque, como los ingenieros también somos humanos y tenemos tendencia a dejarlo todo para el último momento, al final, la fecha de entrega siempre se alarga un par de dias. El nuevo límite está en el Viernes 2 de Octubre, a las 13 horas.

Así que llevo desde el lunes puliendo cosas, reescribiendolo todo, y ahora sí, empiezo a estar satisfecha y orgullosa de lo que voy a presentar... al menos, hasta que él lo mire y vuelva a pincharme el ego...

Eso es todo por hoy, seguiremos informando...

sábado, 26 de septiembre de 2009

Lo que se cuece en mi ciudad

Perdonad que no me pase mucho por los mundos virtuales...

He conseguido acabar la memoria de mi proyecto, está en manos de mi ponente, que tiene que decidir si la acepta o no. Así que estoy celebrándolo. Es un logro personal, seguramente, de los más importantes de mi carrera, aunque no me siento mayor. Aún no. Al menos, hasta que no tenga el OK.

Pero... estos días son fiestas en Barcelona. Es La Mercè. Tengo que confesar que soy una enamorada de las fiestas populares en general, y de Barcelona en particular, así que en estas fechas siempre voy espitosa perdida. Más de 600 eventos programados, y sólo 24 horas al día es casi un acto de crueldad!



Ayer por la noche estuve viendo, como transformaban la fachada del ayuntamiento, este año... en un jardín.... pero me perdí el concierto de Jazz. Esta mañana estoy en casa, porqué necesito descansar.... esta noche, tengo correfoc! Y, aunque nunca me lo pierdo, he tenido que renunciar a dos conciertos y un espectáculo de danza que quería ver...

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Destino


- Yo no creo en el destino.

- Sí lo haces. Pero aún no lo sabes

Quizás todo sea cuestión de casualidades,
o quizás no..
Y tú, ¿crees?, ¿o no crees?

lunes, 21 de septiembre de 2009

99 verdades sobre mí

No son las 99 cosas más importantes de mi vida, ni mis 99 creencias sagradas, ni mis 99 peores momentos, ni los 99 mejores... Sólo son 99 cosas que son verdad, y que probablemente no necesitaseis saber...
  1. Laia es mi nombre real.
  2. Tengo tendencia a acabar las frases con puntos suspensivos...
  3. Supongo que es porque me cuesta acabar las cosas.
  4. Soy una devoradora de libros.
  5. De pequeña, me sabía de memoria los cuentos que me leían. Página a página, antes de saber leer.
  6. Empecé a escribir por obligación, pero pronto descubrí que me gustaba. Solía ganar los juegos florales del cole, en versión prosa. La poesía no es lo mío, aunque tengo un puñado de las que me siento bastante orgullosa.
  7. Tengo mal despertar. Más que malo, lento. No soy capaz de mantener una conversación durante los primeros diez minutos.
  8. Sonrio mucho y a menudo me río demasiado.
  9. No salgo de casa sin el móvil, pero nunca lo oigo
  10. Me gusta andar descalza
  11. Aunque tengo demasiados zapatos... y demasiados bolsos!
  12. ... y llevo demasiadas cosas en el bolso.
  13. Soy supersticiosa y me gusta el número 13.
  14. Soy una adicta a la web 2.0: El primer post que recuerdo haber publicado fecha del 18 de Abril de 2005. Está en un Space de messenger que abandoné a su suerte hace años, pero acabo de comprobar que sigue vivo. No recordaba la fecha.
  15. Además del blog, tengo una cuenta de twitter, un perfil en facebook, otro en Linked'in y un currículum en Infojobs. Estoy enganchada a las tres primeras cosas.
  16. Me hice un tumblr y sobrevivió menos de 24 horas.
  17. Tuve un fotolog durante 2 años, 5 meses y 13 días. Lo dejé el mismo día que abrí el blog. Necesitaba el cambio.
  18. Me gustan los ombligos.
  19. En el sexo contrario, suelo fijarme en las manos, los pies, las piernas, los brazos. Si no me gustan, no tenemos mucho que hacer.
  20. Tengo muy mala leche cuando estoy cabreada.
  21. Si me quedo encallada haciendo algo, lo aparco. Al retomarlo, suele funcionarme mejor.
  22. El problema es que a veces no me acuerdo de retomarlo.
  23. Soy muy curiosa. De pequeña me pasaba el día preguntando porqué.
  24. ... y no he dejado de hacerlo
  25. Me gusta llevar tacones, pero siempre me arrepiento cuado me duelen de pies.
  26. Soy inconstante y dispersa. Tengo tendencia a hacer mil cosas a la vez.
  27. ... y a dejarlas todas a medias.
  28. Me encantan los abalorios. Tengo millones de pendientes, pulseras, anillos, collares... y puedo contar la historia de casi todos.
  29. Sé de memoria montones de fechas, cumpleaños, canciones, citas o frases de películas, libros.
  30. El problema es que no sé en que día vivo. Por eso utilizo agenda, también de papel.
  31. Mis cajones son un caos, pero me gusta tener la mesa despejada. Me molesta el desorden.
  32. Me gusta discutir de casi cualquier tema. Es un buen modo de aprender.
  33. La música que me gusta escuchar es la que tiene cosas que decir.
  34. Acumulo recuerdos en cajas. Me gusta abrirlas de vez en cuando, aunque a menudo acabo llorando cuando lo hago. La nostalgia me recuerda que en algún momento fui tan feliz como para que pudiera doler.
  35. Soy friki, aunque no tengo muy claro de qué.
  36. Me gusta llevar la ropa interior conjuntada. En verdad, necesito llevarlo todo conjuntado, es como un tic.
  37. Me muerdo las uñas, pero no lo parece.
  38. Es importante escuchar/leer mucho antes de hablar de un tema.
  39. No llevo piercings ni tatuajes. Pero me planteé seriamente hacerme uno en la nariz.
  40. Soy rencorosa.
  41. ... pero creo en las segundas oportunidades.
  42. Me gusta estar sola, pero no soporto la soledad.
  43. (Creo que) Hay dos personas en el mundo que me odian. Una de ellas tiene motivo. En su lugar, yo también me odiaria. La otra tiene un problema.
  44. Soy cabezota.
  45. Me gusta jugar. Se me dan bien las cartas y el tabú.
  46. Soy un desastre en el día a día con mi gente, la cuido poco.
  47. Pero hago cualquier cosa para estar cuando estan mal.
  48. Tengo una letra horrible.
  49. No recuerdo haber hecho nada de lo que me arrepienta... Pero me arrepiento de no haber hecho muchas cosas.
  50. Soy cobarde.
  51. Nunca he dicho "Te quiero" mirando a los ojos y con todas las letras.
  52. Me gusta bailar, pero cada vez aguanto menos de noche.
  53. Creo que las verdades absolutas no existen.
  54. Pero yo siempre tengo razón.
  55. Soy adicta al café, pero no lo tomo en casa.
  56. Puedo decir los nombres y apellidos de todos los hombres a los que he (al menos) besado. Tengo una relación (al menos) cordial con todos ellos y no he dejado de querer nunca (al menos) a los importantes.
  57. Soy muy orgullosa,
  58. ... pero sé pedir perdon.
  59. Llevo gafas, tengo varias y escojo unas o otras dependiendo del día.
  60. Soy tímida. En el primer contacto con un grupo grande, no suelo hablar demasiado.
  61. Mis amigos olvidan esto, porque cuando me siento en casa, no callo.
  62. No sé contar chistes.
  63. Me gusta llevar las uñas pintadas, aunque si me lo hago yo, lo que llevo pintados son los dedos.
  64. Soy tan retorcida que se me riza el pelo.
  65. No me gusta llorar en público.
  66. Soy muy reservada. Suelo contar las cosas a toro pasado, cuando ya no duelen.
  67. Un abrazo puede solucionar un millón de cosas.
  68. Me quito los zapatos y me cambio de ropa al llegar a casa.
  69. Creo que el 69 está sobrevalorado.
  70. Soy pecosa. En verano, más.
  71. Llevo toda la vida despertándome con ataques de estornudos por la mañana. Ahora le llaman alergia.
  72. Soy perezosa y me encanta dormir en el sofá.
  73. Me gusta cantar, pero lo hago fatal.
  74. He montado a caballo 10 años, entrenado a taekwondo 8, antes solía nadar y esquiaba un montón. Me gusta hacer deporte pero ahora no hago nada. Mi espalda se queja por ello.
  75. Me fío de mis primeras impresiones. Me equivoco pocas veces
  76. Empiezo a pensar que a nadie le interesa esto
  77. ... y que soy una egocentrica por escribirlo.
  78. Ha sido culpa de LOST. Me he enganchado estos días, y estoy flipando con que nadie tiene una vida normal. No sé que es una vida normal, pero siempre he pensado que la mía no lo era mucho. Más de una vez me han dicho que de mi vida se podría escribir un una serie. A comparación con ellos, mi vida no da ni para el episodio piloto.
  79. Mi padre opina que soy super indecisa. Mi madre dice que soy todo lo contrario.
  80. Yo creo que el problema es que no me gusta tomar decisiones, porque escoger una cosa implica abandonar otra. Y eso es lo que no me gusta.
  81. Me engancho a mil juegos y mil series pero me desengancho con la misma facilidad.
  82. Sería capaz de matar si la vida de alguien a quien quiero dependiera de ello.
  83. Me encanta la playa. Necesito escaparme de vez en cuando. Con la montaña me pasa lo mismo.
  84. No se mentir, y no me gusta hacerlo. Cuando lo hago, lo planifico todo al detalle, como si fuera un cuento, así no se me nota.
  85. Tomo demasiado ibuprofeno. Me duele la espalda, la cabeza y la regla.
  86. Soy una mandona, pero no me doy cuenta.
  87. No odio a nadie, pero lo he hecho.
  88. Mi familia es importante. Y eso que la mía es grande y desjerarquizada.
  89. Mis amigos también. Conservo a mis dos mejores amigas desde que era poco más que un bebé, pero las veo poco. He perdido a gente por el camino, pero aún me duele
  90. Me gusta ducharme por las mañanas. Y no suelo secarme el pelo.
  91. Siempre me lío a organizar los eventos. De vez en cuando me prometo que no lo haré mas, pero recaigo. Supongo que me gusta.
  92. Hago millones de fotos, pero nunca me acuerdo de "revelarlas". La mayoría las cuelgo en el facebook. Mis momentos artísticos están aparcados en un cibercajón en un flicker que actualizo menos de lo que debería.
  93. No sé dibujar
  94. Tengo una coleción de sapos cosas con forma de sapo.
  95. D.
  96. Me gusta creer que priorizo lo importante a lo urgente.
  97. Soy patosa y me salen morados facilmente. Es una mala combinación.
  98. Estoy a punto de acabar mi proyecto final de carrera. Si lo consigo antes del día 30 seré ingeniera antes de que acabe el año.
  99. Llevo 99 posts publicados en este blog, me apetecía contaros un poco más sobre mí... Para que sepáis quien es la pesada a la que leeis. Sin vosotros, no habría llegado hasta aquí. ¡Gracias!

sábado, 19 de septiembre de 2009

Crisis/Oportunidad

Simplificado:
危机 / 机会
Tradicional:
危機 / 機會

Hace unos de días, mientras discutiamos el valor del tiempo, antoniojezu comentó que había leído en algún sitio que en japonés, crisis y oportunidad se escribían igual. Cotilleando un poco, he encontrado esto.

Así que técnicamente es chino y no japonés, y no es que se escriban igual, pero si que comparten un ideograma. Supongo que deberiamos aprender que en cada crisis hay una oportunidad. A mi, todo esto, me recordó algo que leí, y que le atribuyeron a Einstein, aunque no está nada claro si es suyo o no. Lo recibí por mail de mi padre a mediados de febrero, yo estaba en el trabajo, y lo reenvié. Mi jefe lo tiene colgado al lado de su pantalla de ordenador desde ese día. Yo, lo imprimí en casa. Os lo dejo aquí, por si alguien lo quiere.

A mí, la verdad, me importa poco si lo escribió él, o no. La cuestión, es que lo que dice me gusta. A menudo no elegimos las circunstancias de las cosas que vivimos, y la única opción que tenemos, es aprender a convivir con ellas. Y intentar sacarles provecho. ¿Por qué entonces, con la crisis no hacemos lo mismo?

viernes, 18 de septiembre de 2009

La información es poder

Tengo una cuenta de correo en el trabajo, en gmail, otra en hotmail y otra en yahoo. Las dos primeras son las útiles. La tercera es para el messenger, y para almacenar esos forwards que hace tiempo que han dejado de tener gracia. La última es la de registro a todas partes y contenedor de spam. No lo planee así cuando las fuí haciendo, pero.. bueno, es algo que se dió.

La de gmail es la que más uso, así que a veces, se cuela algo de publicidad, alguna consentida, y otra que no soy consciente de haber facilitado. Me ha llegado un email de publi, nada grave, una imagen y poco más:


Y supongo que alguien se preguntará... ¿y a mi que me cuentas? Pues que me ha chocado el enorme vacío blanco. Y cosas de la vida... me ha dado por hacer un seleccionar todo. Observad el resultado:

Claro, que puede ser casualidad que el color blanco de las letras sea el mismo que el color blanco de mi Gmail, claro que alguien puede haberse equivocado de botón al poner la letra... Pero que quereis que os diga, yo me he quedado con una sensación como de... como de... como de que nos toman el pelo. O se creen que somos imbeciles. O algo.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Ciencia ficción

- No me gusta, no me resulta creible.
- Sí, al final se han flipado un poco, pero mujer, ya se sabe... Es una peli de ciencia ficción, si no ponen efectos especiales, no molan.
- No, si no lo digo por eso. Me da igual que haya 1'8 millones de aliens, es más, tienen que estar, que para eso es una peli de aliens. No me molesta que sean todos tontos del culo menos uno, que...
- ¿Entonces?
- Pues que no me parece normal que en una batalla interestelar se acaben peleando 20 tios contra dos aliens. ¿Donde coño se han metido el resto? ¡Vamos hombre!

martes, 15 de septiembre de 2009

El tiempo es oro

He tenido una mañana bastante improductiva, tengo la sensación de estar tirando el tiempo, y lo tengo justo. Tengo que presentar la memória de mi proyecto en menos 15 días, así que, es vital que me cunda. En éstas, que me ha vendo a la cabeza una especie de poema que seguro que muchos recordaréis haber recibido en uno de esos mails que circulaban hace una eternidad. Lo he encontrado sin mcuha dificultad, y creo que vale la pena leerlo:
Para conocer el valor de un año, pregunta a un estudiante que ha repetido curso. Para conocer el valor de un mes, pregunta a una madre que ha dado a luz a un bebé prematuro. Para conocer el valor de una semana, pregunta al editor de un diario semanal. Para conocer el valor de una hora, pregunta a los amantes que esperan para encontrarse. Para conocer el valor de un minuto, pregunta a una persona que ha perdido el tren. Para conocer el valor de un segundo, pregunta a una persona que ha sobrevivido de un accidente. Para conocer el valor de un milisegundo, pregúntale al ganador de una medalla de plata en las olimpíadas.
Puedo contestar muchas de estas preguntas: he suspendido examenes, y perdido cursos. No he tenido hijos ochomesinos, pero he agonizado en la espera para desnudar a alguien. He visto a más de un tren, real y metafórico, cerrarme las puertas en los morros. No he editado un periódico, aunque sé lo que es sufrir los plazos de entrega. He sobrevivido a accidentes, pero no creo que ninguno fuera una cuestión de tiempo. No he ganado medallas de plata, pero recuerdo perfectamente lo que duele quedar segunda.

Pero olvidamos algo. No creo que haya nada que compense un bebé prematuro, ni un accidente, nisiquiera, los segundos puestos. Pero también es cierto mis cursos perdidos han sido, a menudo, años ganados. Que la espera hasta el encuentro, aunque agónica, no hace sino incrementar el deseo. Que perder un tren significa poder leer 30 minutos más, mientras esperas el siguiente... Esta no vale cuando son metafóricos, pero al fin y al cabo, la vida no es tan diferente de los trenes de cercanías. Siempre podrás coger el siguiente.

El tiempo no es el que transcurre en el reloj, es lo que hacemos con él. Y dicho esto, voy a seguir con lo mío, que se me acaba el tiempo...

lunes, 14 de septiembre de 2009

Políticamente correcto




No es bonito luego nunca ver a un compañero [... je...] contra el muro, no? Por tanto, pues bueno la carrera al final fue más o menos lo esperado, no hicimos una buena salida otra vez y ..

Ver a un compañero contra el muro, no es bonito. Ver como tu rival mete la pata y pierde el podio en la última vuelta, regalándote una posición, es un placer.

Debo ser una persona super cruel, y Alonso un capullo integral, pero me encanta este vídeo. No me canso de ver como no consigue evitar reirse.
Este post está dedicado a todos los que no soportan a Alonso, para darles motivos a que le odien un poco más. También está dedicado a todos los que le admiramos.

Edito: Parece ser que no había permisos para poner el vídeo incrustado y no se vé bien... si a alguien le pica la curiosidad lo podeis ver aquí.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Un post polémico

Muchos fuisteis los que pasasteis por aquí a lo largo del día once, sin comentar nada en el post de La Diada. Entiendo, y no pretendo criticar, que en muchos casos, al estar escrito en catalán, nisiquiera os molestasteis en leerlo, otros, supongo, lo intentasteis, sin entender suficiente como para decir nada al respecto. Había pensado en traducir el texto, pero he pensado que para eso ya están los traductores automáticos y que mejor lo explicaba. Al fin y al cabo, para entender, hace falta algo más que el idioma.

Quizás alguno haya escuchado la canción... me gustaría saber qué os transmite, porque a mi me deja la piel completamente de gallina, y no soy capaz de discernir si es por la letra o por la música. ¿Qué siente alguien que no la entiende?

Claire, en su primera visita por mi blog, fue la única en pronunciarse y se mostró sorprendida porque yo hablaba de una celebración, en una fecha en que el mundo entero aún llora lo que podría haber sido el inicio de la III guerra mundial. Ahora que lo pienso, quizás lo fue, y no nos hemos dado cuenta aún. Nuestra Diada también habla de una guerra, y eso es, quizás, lo que pretendo explicar hoy.
Se conmemora la caída de Barcelona en 1714, como reducto de la ya oficialmente finalizada Guerra de Sucesión de la corona Española. Después de 13 meses de asedio, la capital sucumbió ante las tropas borbónicas. El final de la guerra a nivel europeo se firmó Ultrecht en 1713. La batalla tuvo lugar en una proporción de hombres de, aproximadamente, 10 a 1. La biografía de Felipe V dice que "No se ha visto en este siglo semejante sitio, más obstinado y cruel". Mallorca y las pitiusas cayeron un año y un mes después. En enero del 1716 se publicó el Decreto de Nueva Planta que prohibía el uso de la lengua catalana, negaba la existencia de la nación y suprimía las instituciones, las constituciones y los sistemas fiscales y económicos de Cataluña.
Si habéis seguido leyendo hasta aquí y no sois catalanes, o quizás si lo sois, y no sabiais exactamente el porqué de la fecha, os preguntareis por qué coño celebramos una derrota, con la de cosas bonitas que nos deben haber pasado desde entonces. La respuesta es simple: No celebramos la derrota, la recordamos, no se debe olvidar el pasado.
La primera celebración de la que se tiene constancia fue en 1886, un homenaje a las víctimas. En 1901, se detuvo a 34 personas que depositaron flores en la estatua de Rafael Casanova, máxima institución en Barcelona en la batalla de 1714. El primer 11 de setiembre después de la muerte de Franco, se realizó una manifestación multitudinaria en la tumba de Rafael Casanovas, pidiendo la recuperación de las instituciones catalanas y el derecho de autodeterminación.
España tiene un problema con la última Guerra Civil (Hay millones de libros al respecto, pero os recomiendo encarecidamente leer El corazón Helado, de Almudena Grandes, y el post homónimo de Belén), porque, a diferencia de como se ha realizado en toda Europa a raíz de la Segunda Guerra Mundial, y de las masacres nazis aquí no se han pedido explicaciones. Nadie ha pagado el pato por las aberracions cometidas. Vaya por delante, que opino que en la guerra hay vencedores y vencidos, pero que todos somos perdedores. En la transición, todo el mundo estaba demasiado ocupado en tirar adelante, y decidieron que mirar cuarenta años atrás sería contraproducente, se tiró mucha tierra encima, y aún hay demasiada gente que no ha podido llorar a sus muertos.

Si eres anticatalanista y has llegado hasta aquí, te aplaudo, y te admiro. Supongo que te debe salir la bilis por la boca. A mi me pasa algo parecido cuando leo o oigo según qué. Supongo que estarás odiándome, tachándome de inculta, manipuladora, independentista, separatista, insolidaria, y un millón de etcéteras que, con todo mi respeto, me la traen al pairo. Me discuto por igual con personas como tú que con independentistas radicales. Es curioso, como los extremos siempre se tocan.

El 11 de setiembre es la Diada de Cataluña, porque nos recuerda la tenacidad de un pueblo que no está dispuesto a dejarse pisar. De un pueblo pacífico, históricamente dedicado al comercio, que ha sido más atacado que atacante, pero que jamás ha dudado en levantar las armas para defender lo que es suyo. Conmemoramos que no nos rendimos. Es un homenaje a los caídos anónimos, que dieron su vida por su tierra, por su casa.

En pleno siglo 21, parece absurdo echar la vista atrás de semejante modo, esta reflexión parece vana de la mano de alguien que confiesa que la celebración de La Diada no le conmueve, y más aún, de alguien que escribe el 90% de lo que publica en castellano. Lo primero es complicado de explicar, pero creo que tiene que ver con que estamos aún medio acabando el verano, y la fecha queda como difusa. Es un sentimiento similar al del 1 de Mayo. Uno se siente orgulloso de lo que representan, pero no llegan a emocionar. En cuanto a lo del idioma, es más simple: escribo en castellano porque lo hablo con la misma fluidez que el catalán, aunque haya gente que se empeñe en decir que los catalanes somos castellano-analfabetos. Para mi es indistinto pensar, hablar o escribir en uno o otro idioma. Lo hago porque así facilito la lectura de mi blog a más gente. El castellano es, si no recuerdo mal, el tercer idioma más hablado del mundo. Lo haría en inglés o en chino si fuera capaz de expresarme con la misma facilidad. Eso no tiene nada que ver con lo que soy, sino con lo que sé.

Soy catalana, como soy de mi ciudad, o de mi barrio, y me enorgullezco de serlo. Eso no significa que me moleste pertenecer a España, siempre que ésta me deje ser. Nos deje ser. Desciendo a partes iguales de catalanes de raíces irremontables en el tiempo, de pastores y burgueses; de inmigrantes de los duros años 50, e incluso de inmigrantes del siglo XVIII o XIX. Tengo familia en todas partes y una historia tan parecida y tan diferente como la de cualquiera de este país. Me gusta España, adoro Madrid, tanto que podría vivir en ella, del mismo modo que adoro Londres, Florencia o Annecy. España no me despierta ningún sentimiento patriótico. Mi idea de España se parece más a un estado federalista, lo cual, por cierto, es lo mismo que pretendo para Europa, por lo que cosas como Una, Grande y Libre, me parecen tremendas gilipolleces. El problema de la relación de España con Cataluña viene de parte de todos esos que no entienden, o no quieren entender, que no nos pueden obligar a sentir, porque al corazón no se le manda. España es la que es gracias a los que la formamos. Si no me dejan ser catalana, entonces, no me dejan ser española, y eso es un problema para la convivencia. Estuve en Salamanca poco antes del traslado definitivo de los papeles, y recuerdo ver más fotos de políticos catalanes en las portadas de sus periódicos que en los nuestros. Cataluña es la causa del fascismo español, es un blanco fácil, pero es duro, difícil ir por ahí y tener que estar explicando, justificándote. Mi abuela, franquista, creía que los rojos eran demonios con cola, pese a que mi abuelo, su marido, militaba en ese bando. Hoy en día, ser catalán sigue significando para muchos algo parecido a eso.

Nunca he sentido la necesidad de hacer los estados más pequeños, a Europa y lo que he dicho antes me remito, pero si las cosas siguen tensándose, no dudaría en votar que sí ante un referéndum que preguntase otra cosa. Por cierto, el Decreto de Nueva Planta nunca fue derogado.

sábado, 12 de septiembre de 2009

Hoy no salgo

Son las 21:30, aproximadamente. Es sábado, pero no voy a salir, me da igual. Estoy cansada, llevo todo el día delante del ordenador, escribiendo cosas que me aburren hasta a mí cuando las leo. Duermo poco y mal por las noches, y necesito descansar.

Ayer les dije a los chicos que hoy igual montaba cena, pero es tarde, no he dicho nada, y Ana se me ha adelantado y la ha montado en su casa, que desde hace cosa de un año está en la otra punta de Barcelona. Voy a llamar para decir que no me apetece, que estoy cansada. Haré palomitas, me pondré una peli y me quedaré frita en el sofá.

[...]

No sé porqué no mandaré mensajes para decir que no voy a los sitios. No sé porqué soy tan fácil de convencer, y lo que es peor, no sé cómo hacerme inmune al chantaje emocional! En fin, me voy, que estan todos allí, y yo tengo 40 minutos de metro. Suerte que si me duermo, sólo me paso una parada...

viernes, 11 de septiembre de 2009

L'onze de setembre

Ara quedaré malament, però he de confessar que La Diada es un día que em deixa prou indiferent. Sant Jordi em posa la pell de gallina, se m'infla el pit i penso que es una llàstima que a la resta del món no s'estiguin sentint como jo. La Mercè em fa venir ganes de festa, de polvora, de nits cantant pel carrer. Per Santa Eulàlia, i Santa Llúcia m'agrada anar a la catedral, m'agrada baixar a la cripta i perdre'm pel claustre.

Sóc conscient de la importància de la data, encara que ens l'hagin robada i ara sigui l'11-S i no l'onze de setembre, però no m'emociona, simplement. No em desperta res. Em fa bullir més la sang, sento més necessitat d'explicar el que es ser catalana, de treure la Senyera al carrer sentint els discursos de segons quins fatxes, que avui.

Ara bé, cada cop que escolto aquesta cançó, sigui l'hora i el dia que sigui, la pell se m'eriça, el cor s'encongeix i recordo un cop més el que som, i el que seguirem sent.


Així que, sigui avui o el dia de l'any que trieu: feliç Diada a tots!

jueves, 10 de septiembre de 2009

Look de... ¿Otoño?

Tatatachán!

Llevaba tiempo con la idea en la cabeza, hace casi cinco meses que tengo el blog, y no acababa de decidirme, había ido haciendo una chapucilla por aquí y otra por allí, pero no acababa de conseguir lo que quería... Los diseños de blogger se me quedaban cortos, no se me ocurría que widget más añadir. Hace unos días, hablando de sus Cuadernos de Rodaje, Serj me confesó su truco y me contó de dónde había salido su plantilla. Podía haberlo descubierto mucho antes si hubiera mirando el pie de página, al lado de dónde pone ©, pero ya sabéis...

Dejé la idea aparcada para otra ocasíon, pero ya tenía claro que lo haría más pronto o más tarde. Ayer alguien me comentó que iba a hacerse un blog, le enseñé un par de plantillas que había visto y que le iban a sentar genial y... se me volvió a despertar el gusanillo. Estoy de reclusión en casa, acabando intentado acabar el proyecto, escribo poco por aquí, porque es lo que me paso haciendo todo el día, y no me quedan muchas ganas, pero... Cambiar el estilo ha sido como un pequeño juego. Cualquier persona mentalmente sana, cuando quisiera relajarse y cambiar de tema, se alejaría corriendo de un ordenador, en lugar de dedicarse a jugar a ser diseñador, pero... a estas alturas, no pretendo engañar a nadie sobre mi estado.

No sé si será un look definitivo, un cambio estacional, o si en dos días me habré cansado. Quizás aún falte algo por retocar, pero a mi me gusta como queda. Y a vosotros, ¿qué os parece?

martes, 8 de septiembre de 2009

Alguien (me) dijo alguna vez...

Que cambaría todo lo que sabía por todo lo que aún tenía por aprender. Yo no. Pese a que mi curiosidad es insaciable y soy la chica de las mil preguntas, me siento incapaz de renunciar a todo lo que sé.


Especialmente, a lo que me enseñó una bruja...

domingo, 6 de septiembre de 2009

Nada es gratis

Hoy me han preguntado por el post de las disculpas tardías. Si era cierto, si era acual, si estoy bien. Y resulta que se me había casi "olvidado" el tema. Llevo un par de días oyendome decir lo bien que se me ve. Que estoy tranquila, que parezco feliz. Realmente, me siento bien.

No tiene nada que ver con esa conversación: he pasado un par o tres de semanas agonizando, como he repetido hasta la saciedad. Al final he sobrevivido, como siempre, y además, he ganado la partida. Con toda probabilidad, me pasará factura, pero hace tiempo que he asumido que todo tiene un precio. Bucay decia en algún cuento cuyo contenido no recuerdo que ojalá todo pudiera pagarse con dinero. Si el precio a pagar es académico, también resulta asumible.

Volviendo al tema por el que he empezado, claro que me gustaría poder perdonarle, claro que le echo de menos. El día 24 de Agosto, una de las cosas que había escrito y que decidí no publicar, era esto:
- Tengo un problema: llevo un par de días acordandome de todos los que han pasado por mi cama vida.
- Eso no es un problema, es normal echar de menos a gente a la que quisiste...
- No echo de menos a los que yo quise, de hecho, a alguno preferiría no volver a verlo.
- Pues mejor me lo pones, es normal echar de menos a los te quisieron!
- El problema es que echo de menos hasta a los que lo fingieron.
En los momentos dificiles es cuando se echa de menos a los que un día hicieron que lo fueran menos... No lo publiqué porque sabía que no debía. Tenía la extraña certeza de que algo iba a pasar, y no quería provocarlo. Igual que ayer sabía que no era correcto mandar ningún mensaje una noche de sábado, informando a otro pasado de que estaba cenando en un sitio que me traia buenos recuerdos. Quizás se lo comente tomando un café. Avanzar consiste en eso, ¿no?

jueves, 3 de septiembre de 2009

Mi día

Mi despertador iba a sonar a las 8:00, me he despertado a las 7:50. Esto viene siendo habitual, últimamente me programo unos minutos antes. Resulta cómodo, aunque no creo que dure mucho. He desayunado, he hecho la cama, me he aseado, duchado, vestido, etc. He decidido estrenar una camiseta verde que compró Mum para las dos hace un par de días.

Me tocaba coger el coche a mí, tenía que recoger a Rous a las 9, así que a las 8:45 he cogido las llaves, el resto de mis cosas, y me he ido. Llego a la puerta del parking, y me doy cuenta que había cogido las del coche y.... las del apartamento. Tenemos las llaves separadas porque las del parking hacen falta para abrir la puerta, y tener que parar el coche es un rollo. Vuelve a subir a casa, coge las llaves correctas, vuelve a bajar.

Al salir del parking, se abre la puerta y veo un camión parado en medio de la salida. El parking tiene rampa doble y estaba invadiendo tooooodo mi trozo, y parte de al lado. Como estaban a medio descargar y no parecían tener intención de moverse, he maniobrado (mi esfuerzo me ha costado, tanquecito es mejor que un gimnasio) y he intentado salir por el otro lado. Los del taller metalúrgico de enfrente estaban mirando rollo... lo vas a conseguir? Alguien me ha medio parado el tráfico, por que no se veía una mierda, y se ha puesto a indicarme: tiratiratiratira, PARA! CLONC. Sí, le he dado a un coche. Técnicamente, no era un coche, era la furgoneta del taller, que estaba aparcada en su vado, dónde la tienen siempre. Le he hecho una rallada considerable, más grande que ninguna de las otras que lleva, y me he cargado el cristal de mi intermitente. Al menos la luz va. He dado marcha atrás y lo he vuelto a medio meter en el parking, con otra vez, todomiesfuerzo, y se ha acercado uno de los chicos del taller. Me he puesto de tal mala hostia que nisiquiera he recordado que mi madre me dijo que había cambiado de sitio los papeles. El chico me ha dicho que no me preocupara, que le dejara mis datos, que ya me llamaría la jefa cuando llegara. Un señor (creo que el que me estaba guiando, pero no estoy segura) se ha puesto a gritar:
Pero coged la matrícula del camión! Que es culpa de ellos y no de la niña! Ahí ocupando el vado, cogedla, cogedla!!
Yo me la he apuntado, aunque no creo que valga para nada. Le he dado mis datos al chico, que era más bien un señor. Me ha estado tranquilizando un rato: que esto nos pasa a todos, que a mi con la furgo también me pasa, que crees que cabes y luego...

En fin, he conseguido ir a buscar a Rous y hemos llegado a la uni sin más incidencias. Me he pasado la mañana en modo inproductivo total, revisando el mail constantemente, por si me decían algo de la práctica. Acababa de contestar por enesima vez (a la enesima persona, quiero decir) que no, que aún no sabía nada, cuando me ha entrado el mail esperado, con el contenido deseado: APTA!

He realizado las llamadas y los mails pertinentes, y he decidido que, para celebrarlo me iba a comer a casa. Y que pensaba pasarme la tarde durmiendo. Estaba cerrando el ordenador cuando me ha entrado un mail de mi "actual" jefe con una oferta de trabajo para una gran empresa del sector. Aquí es cuando debo hacer un inciso, porque no estoy muy segura de si he contado esto: llevo tiempo trabajando de becaria en la uni. A principios del curso pasado, acordamos que este setiembre firmaría contrato. El problema es que la crisis llega a todos lados y, aunque quieren que me quede, no saben si llegará el dinero. Es una cuestión que está más arriba de mis jefes, en un sitio dónde no soy más que dinero. Los presupuestos no se han cerrado, así que aún no se sabe nada. El mail me ha gustado, porque parece una buena oferta, y me gusta que mi jefe haya pensado en mi, pero por otro lado, supongo que los rumores que se oien de más recortes son ciertos, y lo debe ver más negro de lo que lo veíamos a principio de verano.

Después del minishock, le he contestado, pasándole, por supuesto, un currículim actualizado. He acabado de recoger y he bajado para casa. Al llegaral parking, y hacer la maniobra para meterlo en mi plaza, que incluye un buen trozo marcha atrás, me encuentro un coche invadiéndola. Mi plaza. Y además, con medio morro fuera, para que los vecinos se quejen a gusto de lo mal aparcado que estaba. Después de mi cabreo, sólo se me ha ocurrido hacerle una foto (con el móvil, no muy buena calidad, pero una foto al fin y al cabo), para coger la matrícula y que de paso se viera lo mal aparcado que estaba. He pensado en dejarle una nota, pero como sólo se me ocurrían insultos, he optado por volver a sacar el coche del parking. Por suerte, había un sitio en la puerta de casa. He tenido que subir a casa a buscar el dichoso papelito de la zona verde, que no estaba ni puesto, y pagar 20 centimos, pero eso ya no me parece nada.

Ahora he comido, y me voy a dormir un rato. Hay días que son demasiado intensos. Me da miedo volver a salir hoy a la calle... y volver a ponerme la camiseta verde.

miércoles, 2 de septiembre de 2009

Estoy, estoy

Esta mañana me han recriminado que no había escrito nada en un par de días... Técnicamente, desde el viernes. Tengo un motivo: estoy agotada. Bueno, dos: estoy agotada y he necesitado las 24 horas de los últimos días.

Los setiembres son duros: Se acortan los días. Se acaba el verano. Hay que volver a ponerse más ropa encima, aunque sea por decoro y te acabes muriendo de calor. Y sobretodo, mientras dura la vida académica, siempre hay algo que hacer. En muchos sitios se habla de exámenes en estas fechas, aún cuando ya no se tengan. Este es mi primer setiembre agosto sin examenes desde que (hace ya ocho años) entré en la universidad. Creía que iba a ser una vuelta tranquila: estoy a punto de acabar, al fin. Solo tenía que entregar una práctica que, presumiblemente, no iba a darme ya muchos más problemas, y acabar el proyecto. En menos de dos meses puedo tener el título de ingeniera. La de sangre que hay que sudar para un papelito que certifica algo que uno es.

En fin, que se ha complicado, como siempre. Lo que tenía que ser un paseo, se está convirtiendo en una maratón. Y como siempre, soy la única culpable. Bueno, yo, y mi falta de organización, mi exceso de confianza, mi incapacidad de concentración, ... Me ha vuelto a apetecer dejarlo. Un montón de veces. Tengo ganas de irme a un lugar en que me sienta tan pequeña, tan insignificante, que mis problemas no valgan más que una muesca en el cabecero de mi cama. Uno más, sólo uno más. El verbo rendirse no viene en mi diccionario, al menos por hoy, pero joder, qué pesado se hace a veces.

Total, que mucha verborrea, y muy poco que decir. Lo que yo quería notificar, por si alguien tenía dudas, es que sigo viva, y que no he abandonado esto, ni mucho menos! Sólo que, tengo las neuronas tan saturadas al final del día, que lo que me apetece es leer, ya que no peudo escaparme, ver la tele, intentar dormir, o cualquier otra cosa que implique alejarse de un teclado. Además, cabe la posibilidad de que si me siento a escribir sólo me salga código, o que me salga un texto tan malo como éste. Pero bueno, es mi "espacio de escritura", como dicen algunos que me leen, y lo peor que puede pasar es que alguien le aburra soberanamente la entrada y no vuelva. En tal caso, pido disculpas, y os deseo que disfruteis del viaje.

A los que decidais seguir pasando, volveré con más noticias, o al menos, con algo más que decir...